¿Quieres conocer Alcalá la Real y su entorno? Si visitas Jaén o Granada, no te pierdas Alcalá la Real, un pueblo de la provincia de Jaén, ubicado en la Sierra Sur de Jaén y limitando con Granada. A lo largo de la historia ha sido uno de los municipios importantes de la provincia, fruto de ello, en la actualidad es uno de los destinos turísticos más importantes de Jaén. Desde Hotel Torrepalma, te proponemos conocer Alcalá la Real y te recomendamos qué ver en Alcalá la Real en dos días
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Qué ver en Alcalá la Real en dos días
En Alcalá la Real, hay lugares maravillosos y rincones únicos que no te puedes perder, te dejamos con los lugares imprescindibles que ver en Alcalá la Real en dos días:
DÍA 1
Fortaleza de la Mota:
Comenzamos por uno de los monumentos más visitados en la provincia, La Fortaleza de la Mota. Se trata de una ciudad fortificada que podrás conocer con diferentes experiencias, pasear por sus calles la Iglesia Albacial, con una proyección de su historia, sus bodegas, muros. En la actualidad también podrás visitar la ciudad oculta. Una historia entre árabes y cristinos para hacerse con el control de la fortaleza, que ahora tienes la oportunidad de revivir.
Convento de las Trinitarias
A continuación recomendamos visitar el Convento de las Trinitarias, que se ecuentra pegando a las murallas de la Fortaleza en el casco antiguo de la ciudad, se encuentra este convento que ha sido restaurado y es visitable para conocer su historia y las piezas religiosas que se encuentran expuestas que incluyen desde el Templete y la Custodia utilizados para la Festividad del Corpus Christi a todo un elenco de enseres relacionados con la liturgia.
Por otro lado, destaca el Cristo de la Misericordia, imagen del s. XVI, relacionada con la Escuela Granadina, el busto de San Simón del s. XVIII o la Imagen del Niño del Coro, símbolo por excelencia del convento trinitario alcalaíno. También se incluye una selección de las obras pictóricas más importantes que alberga el convento, junto a bienes muebles, que forman parte de la vida cotidiana de la vida conventual.
El Llanillo
Tras Se trata del eje comercial de la ciudad. Se caracteriza por el resurgir de la ciudad a principios del s.XX siendo característico el estilo de arquitectura de la época con azulejo colorista, molduras de yeso, hierro en las estructura, etc. En su paseo se encuentra la Iglesia de la Encarnación, y el Palacio Abacial.
El lagar de los vinos
Para terminar la mañana, nada mejor que hacerlo con la gastronomía y el vino de la tierra. En época árabe, el entorno de Alcalá la Real era un mar de viñedos, no de olivos, por lo que el vino era muy habitual. (Cuando vayas a la Mota lo sabrás). En la actualidad hay productores locales que apuestan por recuperar las variedades de uva autóctonas y con ellas elaboran de forma artesanal el vino del terreno. En el Lagar de los vinos, podemos degustar este vino, mientras tomamos unas tapas, quesos de la localidad, y conocer cómo se elabora este tipo de vino.
Plaza del Ayuntamiento
Por la tarde, continuamos la visita disfrutando de la Plaza del Ayuntamiento. Se trata de una casa consistorial en un enclave espacioso y luminoso, Se trasladó al ayuntamiento (antes en la Fortaleza de la Mota). Tuvo varias modificaciones y destaca la Torre del Reloj, el cual, se terminó en 1803 por Fernando de Tapia. Como curiosidad, es un reloj que también da las fases lunares y que funciona perfectamente.
Iglesia de Consolación
Es la Iglesia principal de la ciudad, posee un altar mayor presidido por la patrona la Virgen de las Mercedes. Fue sede de la Iglesia Abacial de la Mota tras su incendio.
DÍA 2
Palacio Abacial
- Actualmente es la sede del Museo y centro de interpretación de Alcalá la Real, Área de Turismo, y conservatorio elemental de música. Su estilo es barroco y posee un patio interior con claustro de tres cuerpos.
Barrio de San Juan
Es uno de los barrios con encanto que ha permitido mantener las tradiciones locales hasta nuestros días. En él se celebra la quema de la bruja en la noche de San Juan. Destaca la exposición permanente de la Hermandad del Ecce Homo en su casa, con los trajes, emblemas que desfilan en la Semana Santa Alcalaína.
Barrio de las cruces y San Marcos
Frente al Cerro de la Mota. encontramos el barrio de las cruces. Su nombre se debe a la colocación de gran cantidad de cruces blancas, formando un Vía Crucis, que rememoraba la pasión de Cristo. En la actualidad quedan algunas de ellas en un recorrido por calles tradicionales de los barrios andaluces.
En el Barrio de San Marcos se encuentra la Ermita del mismo nombre, construida en el siglo XVI, de pequeñas dimensiones y de estilo renacentista. Desde el mirador del Cerro se pueden disfrutar de las vistas más privilegiadas de toda la ciudad y del entorno.
Atalayas
Y para finalizar la visita por todo lo alto, recomendamos visitar las Atalayas. El entorno de Alcalá la Real presenta una serie de Atalayas que servían para vigilar el horizonte y poner en guardia la fortaleza en caso de movimientos enemigos. Existen algunas de ellas que todavía se conservan en buen estado.
Bonus
Un plan que no puede faltar en nuestra localidad es ir a tapear, descubre los mejores lugares para ello y no dejes de probar las mejores recetas.
¿Qué te parecen las recomendaciones de Qué ver en Alcalá la Real en dos días? Te proponemos una escapada a Alcalá la Real, alojándote en el Hotel Torrepalma, en el centro de la ciudad, para poder visitar todos los atractivos turísticos y disfrutar del mejor descanso en nuestras instalaciones.
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