Las primeras lluvias de este otoño, que en otras partes del sur y este peninsular han llegado de forma torrencial, causando una verdadera tragedia de muertos y daños materiales, en la zona de Alcalá la Real y comarca han descargado con la mesura deseable, acabando de paso con varios meses de ausencia total de precipitaciones.
Hasta media mañana de este sábado, día 29, se habían recogido en Alcalá casco, y según los datos aportados por la estación de Meteoclimatic, un total de 62,5 litros por metro cuadrado, cifra que se reduciría a los poco más de 51 litros medidos en la estación de la Agencia Estatal de Meteorología en Charilla.
La jornada más lluviosa fue, sin duda, la de este viernes, en que las precipitaciones a lo largo de todo el día alcanzaron los 38,2 litros, con episodios de fuerte intensidad que estuvieron acompañados, al menos en el casco urbano de Alcalá la Real, de cortes en el suministro eléctrico de más de una hora de duración en diferentes zonas de la ciudad, provocando cierta indignación entre vecinos y comerciantes.
En la jornada del jueves se habían recogido un total de 7,6 litros, que venían a sumarse a los 2,2 del miércoles, y a los 3,5 que se llevaban contabilizados, aproximadamente, hasta las 10.30 de este sábado. Agua, en definitiva, ansiada por la agricultura, en un mes de septiembre que había transcurrido excesivamente seco y había puesto ya sobre el mantel la amenaza de una incipiente sequía